ANÁLISIS CASO 3. AISLAMIENTO EN
CLASE
Análisis de la situación.
Empezamos el análisis del caso
número 3, en el que se nos muestra el informe del programa Socioescuela para un
grupo de ESO (1º, por la edad del alumnado) formado por 29 alumnos. La principal
característica del grupo, que será objeto de nuestra atención, es la existencia
de tres alumnos aislados.
Sin embargo, atendiendo al propio
sociograma, podemos obtener otras conclusiones:
Existe una relación de amistad, con
un grupo cohesionado, entre todas las chicas de la clase, algo infrecuente, por
otro lado.
Existe un grupo de chicos con
prestigio social notable (alumnos 22, 24, 26 y 28) que comparten grupo de
amistad.
Existe otro grupo de chicos con
valoraciones medias (excepto el alumno 20, con bastantes elecciones) y que
incluso acumulan bastantes rechazos (caso del alumno 1).
Existe una pareja de chicos con
rechazos no numerosos y escasas elecciones.
Por último, como hemos dicho, hay
tres alumnos cuya relación con el grupo podría ser preocupante.
Aunque la media
del grupo manifiesta estar a gusto en clase, reconoce al tiempo que existen
conflictos. Además, dentro de los alunmos señalados hay situaciones diferentes:
El alumno 25, según el
sociograma, está en situación de aislamiento: es ignorado por toda la clase
tanto en elecciones como en rechazos.
El alumno 7 tiene 2 rechazos,
pero también una elección.
El alumno 17 no tiene elecciones
y sí un número importante de rechazos (14), casi la mitad d ela clase.
Esta estructura grupal nos
muestra índices de riesgo para tales alumnos y una situación potencialmente
conflictiva, a la que hay que dar respuesta después de analizar la situación
con otras intervenciones.
Pautas de intervención.
1ª Fase: recogida de información.
Necesitamos recoger información
sobre la situación real del alumnado aislado en el sociograma. Esto nos puede
permitir saber las causas del aislamiento (podría deberse a la llegada al
centro sin amistades previas, a un cambio de aula, a una situación de aislamiento
provocado por conflicto, etc.)
Para ello, proponemos:-
- Entrevista con los alumnos 25, 7 y 17 para
concretar su situación relacional en el centro - Observación con hoja de registro en el patio (el
profesorado encargado de cuidar patio observa con quiénes se relacionan y de
qué forma: si siguen los juegos o los potencian, si intervienen en las
conversaciones o se limitan a recibir información, etc.). esto se debe hacer
durante una semana.
- Recogida de información del profesorado: si
realizan las tareas escolares en grupo, si perciben comentarios sobre los
alumnos citados, si permanecen aislados realizando actividades o sin participar
en el aula, etc.
- Recogida de información de las familias: `por
medio de entrevistas cuyo objetivo es determinar el grado de integración en el
centro, la red de amistades de los alumnos y si se perciben conductas molestas
por parte de compañeros.
-
Recogida de información del alumnado: los
alumnos 26, 20 y 16, pertenecen a grupos diferentes y al mismo tiempo parecen
estar en situación de liderazgo social pueden proporcionar datos interesantes
sobre las causas de aislamiento en el sociograma de los alumnos.
2ª Fase: mejora de la situación
social de los alumnos y del grupo
A pesar de que el programa recoja
que los alumnos no creen estar ante situaciones de acoso, de la información
recogida en el apartado anterior podrían extraerse diferentes posibilidades:
-
Existencia de conflictos permanentes que
indiquen posibilidad de situación de acoso.
-
Existencia de conflictos permanentes que hayan
llevado a una situación de aislamiento real.
-
Existencia de conflictos puntuales que hayan
llevado a una situación de aislamiento real.
-
Inexistencia de conflictos y situación de
aislamiento motivada por otras causas.
De cualquier forma, parece
necesario contribuir a la mejora de la situación social de estos alumnos. Para ello,
planteamos las siguientes intervenciones:
-
Búsqueda de un sitio en la clase donde el
alumnado señalado encuentre compañeros receptivos ante el mismo.
-
Búsqueda de colchón
social: solicitar a alumnos prosociales
la inclusión del alumnado aislado en su grupo, en actividades lúdicas y
académicas en el centro (no se trata de forzar amistades, sino de hacer
entender a los alumnos que deben contribuir a atenuar situaciones
desagradables).
-
Uso del tiempo de recreo como espacio de
encuentro con alumnos con intereses comunes: aplicación de un cuestionario de
intereses al grupo entero y organización de espacios en torno a los mismos
(deportivos, lúdicos, artísticos, etc.). Existen abundantes experiencias en ese
campo (recreos inteligentes, por
ejemplo).
-
Realización de dinámicas grupales en la sesión
de tutoría: las dinámicas pueden ser más físicas, dramáticas o verbales,
siempre que se logre que el alumnado avance en el análisis de la estructura del
grupo y en la empatía.
-
En caso de ser necesario y positivo, cambio de
aula del alumnado aislado (si sus relaciones son mejores con otra de las aulas
del centro).
-
Contribución del profesorado para dotar de
protagonismo positivo al alumnado aislado (utilizar sus conocimientos como
fuente de prestigio social).
-
Participación preferente del alumnado aislado en
tareas en grupo no estrictamente académicas (colaboración con la biblioteca del
centro, diseño y colocación de cartelería, ayuda en distribución de material
dentro del aula..). Siempre debe buscarse la proximidad entre el alumnado
aislado y alumnado plenamente integrado, de cara a ir estableciendo puentes
afectivos entre ambos.
3ª Fase: seguimiento y evaluación
La puesta en marcha de las
diferentes medidas anteriores puede suponer dos semanas de desarrollo, por lo
que habría que esperar a ver su efecto una semana más. Pasado este tiempo,
proponemos volver a la primera fase de recogida de información (en entrevista
directa, en patio, por medio de la observación del profesorado, por entrevista
con alumnado y, en su caso, con la familia).
La evaluación debe basarse en:
-
Aumento de las interacciones del alumnado
señalado (al alumnado comparte tiempo, conversaciones y juegos con sus iguales en
más ocasiones que antes de la intervención).
-
Aumento de la estabilidad de los vínculos del
alumnado (el alumnado comparte tiempo, conversaciones y juegos con un grupo
estable).
-
Disminución de situaciones de aislamiento social
(el alumnado no permanece aislado en los tiempos de recreo).
-
Disminución de situaciones de aislamiento
académico (el alumnado no permanece aislado en caso de trabajos o actividades
en grupo dentro del aula).
Vistas estas variables, habría
que examinar cómo continuar el trabajo. En todo caso, habría que volver a
aplicar un sociograma a lo largo del curso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario